martes, 31 de marzo de 2015

¿CUÁL ES EL SENTIDO DE TU VIDA?


Tal vez al plantearnos esta pregunta por primera vez podrían parecernos como algo fuera de nuestro alcance, y reservado exclusivamente para los grandes filósofos.

Sin embargo ya los grandes filósofos acuñaron la frase de "Conócete a ti mismo"; con la cual lejos de pretender tener una contestación para toda la humanidad, incentivaban a que cada individuo  encuentre su propia respuesta.

Me da la impresión que para la gran mayoría de la gente vive la vida sin pensar demasiado, ni plantearnos grandes dudas existenciales, es como el paciente que evita ir al médico para que no le diagnostiquen nada malo, preferimos no pensar en la vida que llevamos para evitar encontrar algo que no nos guste.                                                               

He conocido a muchas personas que han vivido durante años creyendo que su vida tenía sentido. Posiblemente durante estos años han disfrutado de una aparente estabilidad, pero si analizamos más a fondo es posible que encontremos indicadores de que en realidad no era así.

Sin embargo como digo hay indicadores que ya nos dicen de que no estamos en el camino adecuado y esto se traduce en forma de irritabilidad, tristeza, ansiedad, dolor, insomnio, fatiga, explosiones de agresividad, desmotivación, mala ingesta de alimentos, tensión, etc.

Debemos interpretar correctamente estas señales de alarma ya que nos están avisando de que estamos pagando un sobrecoste por el estilo de vida que llevamos y que posiblemente, sea mejor revisar el sentido de nuestra vida y trazar un nuevo camino.

En mi modesta opinión sería muy interesante encontrarle un sentido a nuestra vida, pero tiene que ser un concepto individual en donde cada uno valorara y se  permitirá aprovechar al máximo nuestra travesía por este mundo.

Es decir, a cada ser humano le toca encontrar sus propias respuestas, a cada cual le toca descubrir su propia verdad. Lo que es bueno para uno puede no tener sentido para otro, y lo que es significativo para este último puede carecer de valor para el primero.

Aunque el hecho de encontrarle sentido a la vida no nos es enseñado en la escuela, pues al vivir una vida sin verdadero sentido, cualquier cosa que se hace carece de significado y no se obtiene ninguna satisfacción real.

Sin embargo tu vida empieza a tener sentido cuando empiezas a tener claro un objetivo que tú mismo te has fijado, donde la motivación y la ilusión son la energía que te dan fuerzas para caminar cada día en una dirección adecuada.

Cuando has encontrado ese camino, el día a día se torna más fácil, por lo que puedes disfrutar de las pequeñas cosas que antes eran impensables para ti de poderlas disfrutar.

No es que tu vida haya cambiado sustancialmente, es que tu actitud te permite estar más receptivo a todo lo que te rodea y es cuando tu vida empieza a cobrar sentido donde desaparece la tensión y el estrés y empiezas a vivir.

Cuando tenemos ataduras del pasado que nos atormentan, o peor aún, pensamos constantemente en un futuro que no existe, tendemos a sufrir por cada detalle de la vida. Pero no tiene que ser así, enfocarte en el presente es la mejor manera de disfrutar cada momento.

Para Sonja Lyubomirsky, psicóloga de la Universidad de California, explica que se debe saborear el concepto del vivir dia a dia es decir del lujo de las pequeñas cosas que haces en el presente ya que muchas veces estamos tan atrapados en pensamientos absurdos, que nos olvidamos de disfrutar la vida.

Para Sonja Lyubomirsky nos indica que vivir una vida con sentido te permite encajar mejor, reparar y contrarrestar los estados emocionales negativos, te permite tolerar mejor el dolor físico y te ayudará a mejorar tu salud debido a la estrecha relación que existe con tu estado emocional, tu sistema nervioso, tu sistema inmunitario y tu sistema endocrino.

El estrés, la inseguridad, el miedo y la ansiedad no provocan ninguna enfermedad directamente, pero abre la puerta a todo tipo enfermedades y pone a nuestro organismo en una situación de vulnerabilidad a los ataques de cualquier agente patógeno.

Cuando tu vida está en equilibrio es más difícil desestabilizarla; pero al contrario cuando en tu vida tienes un equilibrio precario o incluso te encuentras en un falso equilibrio, lo más fácil es que una pequeña adversidad acabe provocando una explosión de ira, de tristeza o una reacción desproporcionada y fuera de control.

De hecho si uno reacciona descontroladamente ante pequeños contratiempos es posible que necesites pararte a pensar y a valorarlo como una señal de alerta.

Algunas personas buscan dar sentido a su vida a través de posesiones, otras a través de gestas, algunas a través de su posición profesional. Pero existe un acuerdo generalizado entre psicólogos en que la vida plena está estrechamente ligada a desarrollar lo mejor de uno mismo.

Cuando tú has incorporado, asimilado y transferido en tu día a día tus habilidades y virtudes es cuando estarás preparado para reconfigurar tu entorno en consonancia con el sentido de tu vida.

Entonces es cuando se tiene más claro qué es lo que verdaderamente necesitas y lo que es accesorio, lo que te aporta valor y lo que te lo resta, lo que te impulsa y lo que te frena.

En conclusion te diré que cuando la vida te presente razones para llorar, demuéstrale que tienes mil y una razones para reír, porque al final, lo que importa no son la cantidad de años de vida, sino la calidad de vida de los años vividos.

Un fuerte abrazo para todos.

Happy
 
 

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