martes, 17 de marzo de 2015

REFLEXIONES: LA MORAL


Como decía Ortega “Con la moral corregimos los errores de nuestros instintos, y con el amor los errores de nuestra moral”.

¿Qué es la Moral?

La moral son las reglas o normas por las que se rige la conducta de un ser humano en concordancia con la sociedad y consigo mismo.

Por tanto, la moral se relaciona con el estudio de la libertad y abarca la acción del hombre en todas sus manifestaciones.

Origen de la moral

El sentido más antiguo de la moral (de origen griego) residía en el concepto de la morada o lugar donde se habita; luego referido al hombre o pueblos se aplicó en el sentido de su país, tomando especial prestigio la definición utilizada por Heidegger: "es el pensar que afirma la morada del hombre", es decir su referencia original, construida al interior de la íntima complicidad del alma.

En otras palabras ya no se trataba de un lugar exterior, sino del lugar que el hombre porta a sí mismo. "El ethos”o ética es el suelo firme, el fundamento de la praxis, la raíz de la que brotan todos los actos humanos.

El vocablo ethos sin embargo, tiene un sentido mucho más amplio que aquel que se da a la palabra moral. Lo ético comprende la disposición del hombre en la vida, su carácter, costumbre y moral. Podríamos traducirla como "el modo o forma de vida" en el sentido profundo de su significado.

El hombre a través de su vida va realizando actos. La repetición de los actos genera "actos y hábitos" y determinan además las "actitudes". El hombre de este modo, viviendo se va haciendo a sí mismo. El carácter como personalidad es obra del hombre, es su tarea moral, es el cómo "resultará" su carácter moral para toda su vida...

El carácter o personalidad moral, como resultado de actos que uno a uno el hombre ha elegido, es lo que el hombre ha hecho por sí mismo o por los demás. "El hombre en este contexto se hace y a la vez es hecho por los demás, tanto positiva como negativamente".

La Moral (repito: de origen griego) como muy bien dice Vidal, es la "realidad y el saber que se relaciona con el comportamiento responsable donde entra en juego el concepto del bien o del mal del hombre".

La moral florece a partir de nuestros valores que nos dictan si algo está bien o mal (correcto o incorrecto) en un acto humano. Mayor relevancia adquiere cuando el acto afecta a un tercero.

La Moral (de origen latín) significa lo mismo que ético.

Normalmente la ética se emplea respecto a aproximaciones de tipo filosóficas y de tipo racional como tal. El término moral por su parte, se utiliza más en consideraciones de tipo religioso.

Frente a la justificación de las normas de comportamiento utilizamos ética  como concepto. Moral en cambio, es referido a "códigos concretos de comportamiento".

Principio genérico histórico

En el origen, la moral aparece subordinada a la política (moral individual y moral social).

Aristóteles, establecía el individuo como sujeto de la moral y  forma parte de la ciencia de la política (interpretando: lo que en realidad pretendía decir era que lo sustenta el bien particular es el bien común). En la doctrina aristotélica el fin de la moral y de la política son idénticos.

Platón establecía que era el estado y no el individuo el sujeto de la moral, es decir planteaba la virtud no puede ser alcanzada por el hombre sino que el Estado lo debe orientar hacia fines morales, no por medio de la dialéctica sino por la persuasión.

La moral de Kant es de un individualismo radical, ya que busca el deber de la  perfección propia. "Nunca puede ser un deber para mi cumplir la perfección de los otros". Kant sustituye la moral del bien y de la felicidad por una moral del puro deber y de la conciencia individual.

Para Hegel el espíritu subjetivo una vez en libertad de su vinculación a la vida natural, se realiza como espíritu objetivo en tres momentos: Derecho, ya que la libertad se realiza hacia afuera; moralidad, es decir, el bien se realiza en el mundo; y la eticidad, que se realiza a su vez en tres momentos: Familia, Sociedad y Estado, siendo éste último según él, el sujeto supremo de la eticidad, aunque probablemente haya querido decir que el Estado "es" sujeto de eticidad, Estado de justicia, Estado ético.

En resumen, en el origen la moral se encuentra subordinada a la política, tanto la individual como la social, pero la moral social está por encima de la moral individual ya que la moral individual se abre a la moral social porque ella la determina.

Las personas están llamadas a una vida de excelencia, y es el deber del hombre en transmitir ese mensaje en la vida diaria, respetando la dignidad de los demás.

Además todas las personas estamos hechas para vivir en la verdad y debemos buscar los bienes de la comunidad que nos ayudarán en la búsqueda de la felicidad.

“Actualmente estamos frente a una amenaza; se quiere cambiar la conducta humana, poniendo en discusión la moral, que como sabemos estudia los actos humanos buenos o malos a la luz de la razón; para introducir la denominada “moral de la discusión”. La conducta tiene que basarse en una verdad y no es fruto de la discusión de muchos puntos de vista”.

Wittgenstein afirma sobre la moral es lo que sería para él su definición: “La moral es la investigación sobre lo valioso o lo que realmente importa, o de aquello que hace que la vida merezca vivirse, o de la manera correcta de vivir” (Wittgenstein, 1930),

“Olvidamos que la felicidad no llega como resultado de obtener algo que deseamos, sino de reconocer, apreciar y valorar lo que tenemos.”(Fredrick Koening).

Una profunda revisión del valor de la moral y la transparencia y su directa relación en la gestión empresarial, fue realizada por el especialista norteamericano Stephen Jordan, en donde dice que todas las empresas deben ser transparentes en cuanto la moral como principal desafío en todos sus objetivos y trabajos y también la manera de dirigir y llevar la, empresa hacia adelante.

Destaco y menciono el caso ENRON en los Estados Unidos en donde la falta de moral de esa empresa, así como de algunas otras más, repercutió como sabemos todos directamente en la economía de los Estados Unidos.

Todos estaremos de acuerdo que la moral, la confianza, la honestidad y la integridad son las virtudes básicas que importan en el momento de hacer prosperar cualquier tipo de negocio.

En nuestros días, aunque se perfilan avances científicos sin precedentes, hace falta un debate democrático vigoroso sobre el trabajo honesto y sobre la producción moral empresarial. La comunidad científica y los políticos deberían tratar de fortalecer la confianza de los ciudadanos en la ciencia y el apoyo que le prestan mediante ese debate, para hacer frente a muchos  problemas éticos y sociales que nos encontramos.

En el siglo XXI la moral debe convertirse en un bien compartido solidariamente en beneficio de todos los pueblos, que sea un poderoso instrumento para el progreso de los pueblos y la moral desempeñará un papel aún más importante en el futuro a medida que se conozca mejor la complejidad creciente de las relaciones que existen entre la sociedad y el medio natural.

Teniendo en cuenta que la moral no nace sino se hace, debe estar contemplado en todos los programas de educación que tienen la enseñanza ya que es fundamental para la plena realización del ser humano y así ir desarrollando una sociedad más justa desde el punto de vista humano y ético.

La moral es sin duda una fuerza motriz fundamental en el campo y desarrollo humano y una mayor utilización del saber ético podría mejorar considerablemente las condiciones de la humanidad.

Tenemos que aprovechar la revolución de la información y la comunicación ya que ofrecen medios nuevos y más eficaces para intercambiar y difundir  los conocimientos éticos  y así  hacer progresar el conjunto de la sociedad siendo los datos de dominio público.

El progreso ético debe respetar los derechos humanos y la dignidad de las personas, en consonancia con lo que dicta la declaración Universal de los Derechos Humanos.

Hay que tener mucho cuidado que algunas aplicaciones de la ciencia pueden ser perjudiciales para las personas y la sociedad, el medio ambiente y la salud de los seres humanos e incluso poner en peligro la supervivencia de la especie humana, por ello la moral aportara una contribución indispensable para la paz, el desarrollo, la protección y la seguridad mundial.

Incumbe por tanto a los científicos, junto a otros importantes agentes, una responsabilidad   especial para evitar las aplicaciones de la ciencia que son moralmente erróneas o que tienen consecuencias negativas. De ahí  la necesidad de practicar y aplicar a la investigación de acuerdo con las  normas morales apropiadas, fundadas en un amplio debate público, en donde la labor científica y el uso del saber científico deben respetar y preservar todas las formas de vida y los sistemas de sustentación de la vida de nuestro planeta.

Existen obstáculos para los denominados grupos desfavorecidos, ya que han impedido la plena participación por igual de hombres y mujeres, de las personas discapacitadas, de los pueblos indígenas y las minorías étnicas,

La mayoría somos conscientes y además lo sabemos muy bien que los estados tienen  problemas mundiales urgentes que resolver, como la pobreza, la degradación del medio ambiente, la insuficiencia de los servicios de salud pública, la seguridad del suministro de alimentos y agua, especialmente en relación con el crecimiento demográfico y deben asumir un compromiso ético firme en pro del bienestar de la sociedad.

Hoy más que nunca, la moral y sus aplicaciones son indispensables para el desarrollo, mediante los apropiados programas de educación e investigación, siempre bajo una base solida de actuación  moral. Las autoridades, sea cual fuere su ámbito de competencia, y el sector privado deben prestar más apoyo a la construcción de una capacidad científica y tecnológica adecuada y distribuida de manera equitativa, fundamento indispensable de un desarrollo económico, social, cultural y ambiental.

Esta necesidad es especialmente apremiante en los países en desarrollo. El desarrollo tecnológico bajo un prisma ético exige una base científica sólida y debe orientarse hacia modos de producción seguros y no contaminantes, una utilización de los recursos más eficaz y productos más inocuos para el medio ambiente.

Todos estos objetivos van caminados  a conocer y proteger mejor la base de recursos naturales del planeta, la diversidad biológica y los sistemas de sustentación de la vida.

El objetivo debe ser avanzar hacia estrategias de desarrollo ético sostenible mediante la integración de las dimensiones económicas, sociales, culturales y ambientales.

La enseñanza científica y la propagación de los medios éticos deberían no tener límites y ser objetivos muy amplios, sin discriminación y que abarque todos los niveles y modalidades, es un requisito previo fundamental para las democracias y el desarrollo sostenible.

En los últimos años se han hecho esfuerzos para tomar medidas en todo el mundo para promover la enseñanza básica para todos, pero los estados no deberían olvidar estar en sus programas la enseñanza curricular de la moral y favorecer cátedras de deontología en todas las universidades ya que esto es  esencial para el buen avance de toda sociedad y se reconozca el papel primordial de la moral en el progreso científico en donde se deben realizar esfuerzos para mejorar su comprensión de los adelantos logrados en esos terrenos.

La enseñanza, la transmisión y la divulgación de la  moral  deberían  construirse sobre esta base que es fundamental para la mejora como hemos dicho de una sociedad justa y progresista y buscar así la excelencia en ella.

Es preciso proteger moralmente y adecuadamente los derechos de propiedad intelectual a escala mundial, y el acceso a los datos y la información es fundamental para llevar a cabo la labor científica y plasmar los resultados de la investigación científica en beneficios tangibles para la sociedad.

La moral se debería difundir y expansionarse paralelamente a la investigación científica y la utilización del saber derivado de esa investigación deberían estar siempre encaminadas a lograr el bienestar de la humanidad, y en particular la reducción de la pobreza, respetar la dignidad y los derechos de los seres humanos, así como el medio ambiente del planeta, y tener plenamente en cuenta la responsabilidad que nos incumbe con respecto a las generaciones presentes y futuras.

Hay que garantizar la libre circulación de la información sobre todas las utilizaciones y consecuencias posibles de los nuevos descubrimientos y tecnologías, a fin de que las cuestiones morales se puedan debatir de modo apropiado.

Todos los países deben adoptar medidas adecuadas en relación con los aspectos éticos de la práctica científica y del uso del conocimiento científico y sus aplicaciones.

Dichas medidas deberían incluir las debidas garantías procesales para que las divergencias de opinión y quienes las expresan sean tratados con equidad y consideración.

Todos los investigadores deberían comprometerse a acatar normas morales estrictas y habría que elaborar para las profesiones científicas un código de deontología basado en los principios pertinentes consagrados en los instrumentos internacionales relativos a los derechos humanos. La responsabilidad social que incumbe a los investigadores exige que mantengan en un alto grado la honradez y un control riguroso sobre la calidad profesional, y que difundan sus conocimientos, participando en el debate público y formen así a las jóvenes generaciones.

Las autoridades políticas deberían respetar la acción de los científicos a este respecto.

Como hemos dicho anteriormente los programas de estudios científicos deberían incluir la moral en la ciencia, la historia y en la filosofía y en todas sus repercusiones culturales.

Siempre hay grupos que se han comprometido a hacer todo lo posible para promover la ayuda entre la comunidad científica y la sociedad, a promover la educación científica y los beneficios de la ciencia, a actuar con moral y espíritu de cooperación en nuestras esferas de responsabilidad respectivas, a consolidar la cultura científica y su aplicación con fines pacíficos en todo el mundo, y a fomentar la utilización a través de nuestra profesión y del saber científico en pro del bienestar, la paz y el desarrollo de los pueblos .

Tipos y arquetipos  Morales

Ya hemos dicho que la Moral y en líneas generales es la  ciencia que estudia la bondad o maldad de los actos humanos.

Con esta definición tenemos que la Moral posee dos aspectos, uno de carácter científico y otro de carácter racional.

El carácter científico queda fundamentado en que la moral es una ciencia; la ciencia es un paradigma fundamentado, paradigma porque establece un modelo universal o patrón de comportamiento de la realidad y nos puede decir cómo se va a comportar dicha realidad, o sea que la ciencia puede predecir el comportamiento de un objeto debido a que proporciona el modelo bajo el cual actúa, así pues la ciencia nos “indica” como “debe” actuar un objeto.

Esto es  fundamental ya que se utiliza el método científico, que es el encargado de corroborar por todos los medios posibles la adecuación del modelo con la realidad.

Recordemos que el modelo inicial que propone la ciencia es una hipótesis y que gracias al método científico, la hipótesis puede comprobarse y en ese momento se trata ya de un modelo fundamentado.

Así pues el carácter científico de la moral queda fundamentado en virtud de que esta disciplina presenta un paradigma de conducta valiosa que el hombre debe realizar.

El carácter racional viene por el uso de la razón. La moral no es una ciencia experimental, sino racional ya que fundamenta sus modelos éticos por medio de la razón. Ésta razón nos proporciona causas, razones y el porqué de la bondad en una conducta realizada.

Para reflexionar sobre la moral, la ética hace una investigación filosófica sobre el comportamiento moral de las personas. El punto de partida es, pues, la descripción de la vida cotidiana (moral descriptiva).

Después se procede a criticar y reformular las normas morales vigentes en la vida cotidiana de acuerdo con principios éticos racionales (moral normativa).

Estos principios también son revisados y cuestionados por una reflexión crítica más profunda (metamoral).

Finalmente, tras esta doble revisión crítica, ofrecerá normas, valores y principios morales concretos para orientar nuestra conducta en la vida cotidiana (moral aplicada).

Moral personal: Es la decisión que uno como individuo o como persona realiza para escoger la opción buena o la opción mala, de acuerdo a los valores y la formación de cada persona.

Moral profesional: La profesión puede definirse como “la actividad personal, puesta de una manera estable y honrada al servicio de los demás y en beneficio propio, a impulsos de la propia vocación y con la dignidad que corresponde a la persona humana”.

Cuando se emplean sentencias morales se está valorando moralmente a personas, situaciones, cosas o acciones. De este modo, se está estableciendo juicios morales cuando, por ejemplo, se dice: "Ese político es corrupto", "Ese hombre es impresentable", "Su presencia es loable", etc. En estas declaraciones aparecen los términos ''corrupto'', ''impresentable'' y ''loable'' que implican valoraciones de tipo moral. La moral estudia la ética y determina qué es lo bueno y, desde este punto de vista, cómo se debe actuar. Es decir, es la teoría o la ciencia del comportamiento humano.

Con todo esto se puede decir que a la Moral le concierne proporcionar las razones por las que ciertas conductas son buenas y por lo tanto dignas de realizarse, también de argumentar en contra de conductas malas como el homicidio, la drogadicción, el engaño, el robo, etc.

El objeto material de la moral

El objeto material de la moral son los actos humanos (desde el punto de vista del bien), libres y deliberados, debido a que determinan el carácter (modo de ser adquirido por hábito y por lo tanto determinantes de nuestras vidas). Por dichos actos me refiero a los actus hominis y humanis, pero no a los primo primi, ya que al ser provocados por causas naturales son ajenos a la moral.

Algunos conceptos relevantes de la moral

Cuando analizamos la realización de una “acción moral” (como, por ejemplo, ayudar a una persona agredida), descubriremos una serie de conceptos que están interrelacionados  tales como: “normas”, “responsabilidad”, “valores”, “obligación”.

Veámoslo: el análisis de la acción moral “ayudar a una persona agredida”, nos revela, en nuestro comportamiento, el valor del respeto a la integridad física o psíquica de las personas, la obediencia a la norma moral “las personas debemos ayudarnos entre nosotros”, la obligación de cumplir tal norma porque valoramos positivamente este tipo de comportamiento y nuestra responsabilidad de evitar las agresiones en la medida de nuestras posibilidades.

Nuestra conducta es libre.

Es una de las características de la moral. Si nos hallamos coaccionadas por causas externas, perdemos el control sobre nuestros actos y se nos cierra el camino de la elección y la decisión propias (perdemos la libertad). El resultado es que realizamos actos no decididos libremente y, por tanto, no se nos puede hacer responsables de nuestros actos. Ahora bien, que la coacción exterior nos pueda anular la voluntad (libertad) y nos pueda eximir de la responsabilidad, no debe ser tomado en un sentido absoluto, porque, en la mayoría de los casos, a pesar de la coerción externa, todavía nos queda un margen de opción y, por tanto, de responsabilidad moral.

Valoración moral

La moral, como ya hemos visto, se refiere tanto a las acciones como a los productos humanos que pueden ser valorados como “buenos” o “malos”. La valoración moral consiste en atribuir un valor a una acción o producto humano.

Obligación moral

Nuestro comportamiento moral está orientado por las normas morales. Las normas morales expresan obligaciones (dicen que “algo” es un deber). En este sentido, podemos decir que tenemos la obligación de comportarnos conforme a las normas morales y de evitar los actos prohibidos por ellas.

Pero esa obligación debe ser “elegida” y no impuesta; debe ser fruto de una convicción interior: sólo estamos obligadas moralmente cuando conocemos las normas, cuando las reconocemos como nuestras, y podemos elegir cumplirlas optando libremente entre varias alternativas.

Dilemas Morales

Cuando una persona se halla en una situación que le exija cumplir con dos o más deberes al mismo tiempo, pero sólo puede cumplir uno de ellos, se encuentra ante un problema o dilema moral.

Con frecuencia, los dilemas morales son comparados con conflictos trágicos de solución imposible debido a la contraposición de preceptos irreconciliables. Sin embargo se trata de un fenómeno cotidiano que se da en todos los ámbitos de nuestra vida (familiar, profesional y personal).

Un caso de dilema moral, propuesto por Esperanza Guisán, es el siguiente: imaginemos una mujer que, para seguir viviendo, necesita que su marido abandone su actual carrera profesional o política. Lo necesita en el sentido de que, de seguir su marido dedicado a la vida profesional y pública, ella se sentirá abandonada, sometida a depresiones continuas que deteriorarán paulatinamente su estado físico y mental, lo cual haría temer un desenlace fatal (el suicidio).

¿Debe el marido sacrificar su carrera para que su esposa no se suicide? ¿Qué vida debe prevalecer sobre la otra? ¿Qué concepto de vida debe ser prioritario?

La resolución de dilemas morales no consiste únicamente en solventar conflictos entre principios o derechos (derecho a la vida frente al derecho al éxito profesional). También hay que valorar y arbitrar los distintos intereses de las personas que se hallan implicadas.

Conclusión

Según todo lo dicho y a modo de resumen diremos en este escrito que la moral  engloba la ética, la virtud, el deber, la felicidad y en el vivir del día a día.

La moral se ha de aplicar posteriormente a los distintos ámbitos de la vida personal, profesional y  social.

Por tanto la moral consiste en proporcionarnos los elementos necesarios para poder resolver nuestros conflictos, de manera que podamos lograr el equilibrio psíquico, potenciando nuestros deberes como buenos ciudadanos y tratando de conseguir unos planos y relaciones armónicas que sean justas con las demás personas.

Y terminare diciendo lo que decía el gran Ernest Hemingway

La moral es lo que hace a uno sentirse bien y lo inmoral es lo que hace a uno sentirse mal.

Un fuerte abrazo para todos.

Happy
 
 

 

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